martes, 20 de febrero de 2018

MI VIDA CON LA TELEVISIÓN




Si la memoria no me falla... mi vida televisiva comienza quince años atrás, cuando a penas sabía hablar pero me sentaba con mis padres en el sofá a ver dibujos animados.

Recuerdo que en aquella época veía únicamente dos progamas. Uno de ellos era Dragon Ball, un programa de super héroes ficticios que luchaban por el poder del mundo, y por buscar siete bolas mágicas que otorgaban la eternidad. Por aquella época creía que eran reales al igual que Los Reyes Magos, pero a medida que creces, te das cuenta de que no todo parece ser como es. A día de hoy me parece que esta serie, que era emitida en un canal llamado boing, ya no se emite, pero se puede seguir viendo por internet si sabes donde buscarla.
       El otro programa, también de dibujos animados, se llamaba Phineas y Ferb. Solían echarlo sobre las 9 de la noche, antes de la hora de dormir, pero no recuerdo con qué frecuencia lo veía. Hoy en día lo sigo viendo alguna que otra vez para recordar viejos tiempos, pero no con la misma ilusión que se tiene cuando eres pequeño.
            Así se resume la primera etapa con la que empecé a disfrutar de la tele conscientemente; y digo conscientemente, porque hasta los 5 años simplemente veía muñecos moviéndose, sin comprender qué eran ni de que trataban. Asi que sin mas preámbulos os cuento mi siguiente etapa relacionada con la tele.

Resultado de imagen de los lunnis
                 De los 7 a los 10 años veía una serie muy educativa llamada Los Lunnis, pero solo podía verla por las mañanas a las 7 antes de ir al cole. Recuerdo que se emitía en Cartoon Network, pero hoy en día hay mil programas educativos más como Peppa Pig, la patrulla canina... . Me gustaba tanto que de tarde echaba horas jugando en el ordenador a un juego relacionado con Los Lunnis que trataba de colorear y reconocer objetos para aprender. Eran buenas épocas en las que no tenías preocupaciones por absolutamente nada.


Resultado de imagen de netflixMás tarde llegó la edad de salir al parque a jugar con los amigos del cole, y entonces la tele pasó a estar a un segundo plano en mi vida. Ya no tenía esas ganas locas de ver dibujos o de pasar un largo rato frente al televisor. En aquella época iba a clases de Kárate y Judo, por lo que la tele me era indiferente.

         Hoy en día mi relación con la tele es nula. Cuando tengo tiempo libre veo películas por internet o en Netflix , en cualquier lugar y en cualquier momento, lo cual es más cómodo. Los tiempos han cambiado mucho desde que éramos pequeños; ahora a los niños se les enseñan videos educativos desde YouTube , y no desde la tele... . Se podría decir que las nuevas tecnologías cambiaron drásticamente el sentido de la televisión ya que ahora pasamos más tiempo en redes sociales y Youtube, quitándole la importancia que tenía antes. Otro claro ejemplo son las televisiones de hoy en día, que vienen ya incorporadas con internet y páginas de pago para ver películas.